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Tratan con éxito artrosis de cadera y rodilla con células madre

Tratan con éxito artrosis de cadera y rodilla con células madre

Las células madre han surgido como un método revolucionario para tratar diferentes enfermedades.

Los bancos de células madre, han logrado beneficiar personas que han padecido de artrosis en las rodillas y en su cadera llegando a una efectividad muy alta en dichos tratamientos.

Para el tratamiento de artrosis de cadera se requieren células madre mesenquimales, las cuales se cultivan en el laboratorio y luego de tres a cuatro semanas las células están listas para tratar al paciente.

Los resultados que se obtienen van desde la atenuación del dolor, hasta el retraso por años de una posible cirugía de reemplazo de cadera. Incluso en algunos pacientes la mejora es tal, que no se requerirá de cirugía.

Usar células madre para el área traumatológica aumenta la esperanza de vida y con ello, las enfermedades relacionadas con la edad, como la artrosis.

Según remarcan los expertos, los beneficios de este tipo de tratamientos son tangibles, ya que se requiere un menor tiempo de recuperación, no hay riesgo de infección que significa someterse a una cirugía y no se requieren largas estadías en clínicas dado que muchos procesos son ambulatorios. A largo plazo, la inversión es conveniente, ya que se gana en calidad de vida en el corto plazo.

Los deportistas también se pueden beneficiar de estas terapias, ya que el alto desgaste que genera la actividad física puede generar lesiones crónicas que merman la calidad de vida e impiden seguir realizando la actividad. Por ello, personas de todas las edades podrían beneficiarse de un tratamiento con células madre.

GARANTIZAR CALIDAD
El éxito en los tratamientos se debe al compromiso de la empresa en la que se almacenan que debe de tener la más alta calidad en todos sus procesos y con ello poder garantizar la mejor viabilidad de las mismas.

Se recomienda que mientras más temprano en la vida se criopreserven las células madre mejor, ya que mientras envejecemos las células madre permanecerán con la misma edad que cuando fueron congeladas, con su misma potencialidad, pureza y vitalidad.